Centrado en la evolución de los materiales, equipamientos y formas de ejecución de los tratamientos superficiales. Incluye la historia en Uruguay y un comparativo actual con la situación entre nuestro país y uno de las líderes en el mundo en esta tecnología, Nueva Zelanda.

A pesar de que se conocen habitualmente los tratamientos simples o dobles, existen una gran variedad de alternativas según la aplicación, el resultado esperado y los materiales usados que ameritan nombres particulares para cada tecnología.

Los tratamientos aquí presentados son en su mayoría tomados de la experiencia australiana y neozelandesa. También se presentan los novedosos tratamientos múltiples trabados, tecnología patentada por Bitafal en EEUU y en Uruguay.

Incluye los requerimientos y exigencias de áridos y ligantes usados en tratamientos superficiales, detallando ensayos de calidad y proponiendo especificaciones. Este capítulo profundiza específicamente en las emulsiones, su química y su correcta utilización.

Se presentan las diferentes formas de seleccionar tratamientos superficiales según tráfico, capacidad de mantenimiento, criterios de seguridad vial, condición de la superficie y clima. Se espera que el lector pueda, con la información que tenga disponible, seleccionar el mejor tipo de tratamiento, de árido y ligante para lograr la mayor vida útil.

La vida útil de un tratamiento depende fundamentalmente de la calidad de la superficie sobre la cual estará apoyado. Para ello, en este capítulo se profundiza en la calidad necesaria de la base y de las diferentes reparaciones previas necesarias para aplicar el tratamiento. Incluye la importancia del uso de estabilizados y reciclados con ligantes y la sinergia que logran junto con los tratamientos para lograr pavimentos de alta calidad.

Un punto fundamental para el correcto desempeño del tratamiento es la correcta proporción entre los materiales considerando todas las variables en juego como el tráfico, la calidad de la superficie, tipo de tratamiento y de material. Se presentan 3 niveles de diseño que van incrementando su complejidad según la información disponible y por ende la calidad esperada. Se puede realizar el diseño simplemente con el tipo de árido disponible y de forma empírica, luego un diseño por tablas que consideran variables como la superficie y el tráfico hasta un diseño racional donde cada paso requiere la información real medida en campo o laboratorio.

Una vez seleccionado el tipo de tratamiento y los materiales, así como pronta la superficie, procedemos a la ejecución según el diseño realizado. En este capítulo se presentan los equipos necesarios, las mejores prácticas para cada etapa de la ejecución de los diferentes tratamientos así como guías para la correcta calibración de los equipos.

Como en cualquier actividad, pueden existir fallas prematuras y es necesario saber identificarlas para solucionar el problema detectado así como para evitar que suceda en el futuro. En este capítulo se presentan las fallas más habituales de los tratamientos así como las diferentes alternativas para reparaciones localizadas o en ancho entero.

– Capítulo 6.2.1: Cambio de la regla del octavo por la regla del décimo para el cálculo de la tasa de emulsión en el método experimental directo.

– Capítulo 6.2.3.9: Al final de la dosificación del tratamiento doble por método Austroads, se incorporó una aclaración para riegos ejecutados con menos de 72 horas de diferencia. “Se recomienda que la dosificación de agregados y ligante del Riego A sea reducida un 30%. De esta forma se favorece que ambos riegos generen mejor trabazón”.

– Capítulo 8.3: En las fallas por pérdida de piedra, se incorpora el desprendimiento de árido B en tratamientos dobles.

– Capítulo 2.7.1: Inclusión de riego de curado para bases estabilizadas dentro de riego antipolvo.

– Capítulo 2.7.6: Unificación de nomenclatura a “microaglomerados” en frío (microsurfacing).

– Capítulo 3.4.4: Cambio en Figura 3.18 incorporando desempeño de línea de emulsiones para diferentes tráficos y temperaturas de pavimento.

– Capítulo 4.2.2.2: Inclusión de un mapa con los grados de penetración de asfalto recomendados para América Latina.

– Capítulo 4.4.3: Corrección en diagrama de ciclo de vida de un pavimento con tratamientos superficiales.

– Capítulo 7.4.6: Inclusión de compactación óptima en bases estabilizadas.

– Capítulo 8.5.1: Cambio a aplicación de “polvo de cantera”, en vez de “arena”.

– Apéndice G: Cambio en Tabla G1 y Figura G1, incluyendo la emulsión sugerida para diferentes tráficos y regiones climáticas.